Una base estadounidense en Irak fue atacada el sábado y un ataque israelí en Siria mató a cinco miembros de la Guardia Revolucionaria de Irán en el país, en las últimas señales de que la guerra en Gaza se está extendiendo por toda la región. Múltiples misiles balísticos alcanzaron la base aérea de Al-Asad, causando heridas leves entre el personal estadounidense y de la coalición e hiriendo gravemente a un miembro del servicio de las Fuerzas de Seguridad iraquíes, dijo un funcionario de defensa estadounidense. Algunos de los misiles fueron interceptados por sistemas de defensa aérea. La Resistencia Islámica en Irak, respaldada por Irán, asumió la responsabilidad del bombardeo. El ataque se produjo horas después de un ataque contra un edificio residencial en Damasco, según la agencia de noticias siria SANA. El ataque, que tanto Irán como Siria atribuyeron a Israel, es uno de los muchos dirigidos en las últimas semanas contra grupos cada vez más agresivos respaldados por Irán y que Teherán ha utilizado para proyectar poder en Medio Oriente.
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