La oficina de derechos humanos de las Naciones Unidas ha acusado a las fuerzas israelíes de posiblemente violar las leyes de la guerra durante su campaña militar en la Franja de Gaza. Según la ONU, Israel podría no haber distinguido adecuadamente entre objetivos civiles y militares, lo que ha llevado a importantes bajas civiles y destrucción. Navi Pillay, jefa de una Comisión de Investigación de la ONU, enfatizó la necesidad de rendición de cuentas por estos presuntos abusos, describiendo la escala de pérdidas civiles palestinas como 'exterminio'. Las acusaciones surgen en medio de un contexto más amplio de conflicto en escalada, con la ONU expresando serias preocupaciones sobre el impacto humanitario de los ataques aéreos israelíes y la conducta de la guerra en áreas densamente pobladas.
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